En México apenas se recicla sólo un el 6 por ciento y ante esto enfrenta un desafío ambiental, señala la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).
Este escenario ejerce una presión sobre nuestros ecosistemas. ¿Y si la solución no radica únicamente en aumentar las tasas de reciclaje, sino también en reducir la producción de residuos?
Cifras de la dependencia, indican que se generan alrededor de 44.6 millones de toneladas de residuos urbanos al año, de las cuales aproximadamente 7 millones corresponden a plástico. La mayoría de este plástico es convertido en bolsas que terminan en vertederos o, lo que es peor, contaminando el planeta.
En medio de esta realidad, Bioelements, una empresa de packaging sustentable, emprendió la búsqueda de alternativas para abordar este problema de manera efectiva y sostenible.
En colaboración con profesionales de la UNAM y científicos internacionales, desarrollaron bolsas biodegradables que no solo cumplen con más de 25 normativas estatales y municipales que regulan el uso de bolsas de un solo uso en México, sino que también ofrecen cuatro tipos de biodegradabilidad.
- Biodegradación con presencia de oxígeno y altas temperaturas: Este tipo de biodegradación es ideal para condiciones de compostaje y se descompone en aproximadamente 6 meses. Para una descomposición más rápida, se pueden cortar las bolsas en pequeños pedazos y agregarlas junto con residuos orgánicos generados en casa.
- Biodegradación sin presencia de oxígeno: Este proceso ocurre en vertederos y rellenos sanitarios, y las bolsas de Bioelements pueden biodegradarse en un período de 6 a 12 meses.
- Biodegradación mediante hongos filamentosos: En este caso, microorganismos descomponen los compuestos orgánicos de manera natural. Este proceso puede tardar hasta 20 meses.
- Biodegradación marina: En ambientes marinos, los microorganismos descomponen y reciclan materiales orgánicos, convirtiendo las bolsas y materiales de Bioelements en energía y alimento para los microorganismos marinos. La duración de este proceso varía de 3 a 20 meses.
Las bolsas de Bioelements generan hasta un 60% menos de emisiones de CO2 en comparación con las bolsas no biodegradables. Esto marca una gran diferencia en la lucha contra el cambio climático.
Varias marcas en México, incluyendo Coppel, Palacio de Hierro, Oxxo, CircleK, LaComer y Miniso, ya están adoptando estas bolsas biodegradables en colaboración con Bioelements, demostrando su compromiso con el medio ambiente y la sostenibilidad.
Ignacio Parada, fundador y CEO de Bioelements, afirma: «El futuro de la gestión de residuos y, en consecuencia, la preservación del medio ambiente depende de la adopción de prácticas más sostenibles en el comercio.